El eje central de la asamblea general de colegiados celebrada el 22 de febrero fue la presentación de la actualización del plan estratégico para la potenciación de la profesión englobado en el “Estudio veterinaria 2030: Libro Blanco de la Profesión Veterinaria” que el Colegio ha encargado, con la colaboración de AMVAC, a la empresa Análisis e Investigación, que expuso en la asamblea un resumen de los resultados obtenidos, de los que iremos informando detalladamente en próximas entradas del blog, para así ir “desgranando” cada una de las principales conclusiones y las líneas estratégicas de actuación que se derivarán de ellas.
En líneas generales, explicaron que tras encuestar a más de 1500 veterinarios, éstos consideran que los principales problemas de la profesión son: escaso reconocimiento social, exceso de facultades, baja remuneración económica, precariedad laboral, exceso de veterinarios y falta de convenio laboral.
La percepción de la labor del Colegio de Veterinarios de Madrid ha mejorado significativamente desde el estudio anterior presentado en 2007 y por ello, en el enfoque se cara a 2030 se ha pasado de un plan de potenciación colegial “hacia dentro” a un plan de potenciación profesional “hacia fuera”, de forma que el Colegio se convierta en una “palanca” para el desarrollo y mejora de la situación actual de la profesión en general y del sector de animales de compañía en particular, para el que se ha realizado un estudio específico.
Según se deriva del análisis de los resultados del estudio, sería bueno establecer un código voluntario de buenas prácticas profesionales para luchar contra la precariedad laboral, mejorar el reconocimiento profesional y social de los veterinarios, mejorar la actividad investigadora, revisar el código deontológico y establecer un Plan de Comunicación, ya que el Colegio debe convertirse en el “altavoz” de los veterinarios del siglo XXI.